Homenaje y dedicatoria a Karmele, por Elvira Resano
27 diciembre, 2019Taller de escritura creativa: En el medio rural de Álava, nosotras contamos
1 octubre, 2020A fuerza de pasar tiempo con algunas personas acabas olvidando lo grandes que son, a veces te olvidas de su biografías, lo que para cada una de ellas supone estar en este sitio y en este lugar, a veces te olvidas de su capacidad de superación y de eso que ahora llamamos resiliencia, de reinventarse día a día y aprender a sacar lo mejor de sí mismas a pesar de las dificultades.
Cada 8 de Marzo mi mirada se vuelve a todas y cada una de las mujeres de mi vida y de las que no lo son y me permito mirar a las más mayores y reconozco, cada año asombrada, sus luchas y sus cambios, cambios a veces que desde mi posición me cuesta ver, pero cuando las tengo enfrente las miro y las veo. También cada 8 de marzo descubro a las más jóvenes, benditas guerreras inconformistas, con ideas diferentes a las mías, más nuevas y a veces más transgresoras y con una fuerza… Admiro su fuerza, esa capacidad tan joven y adolescente que a veces los años adormece y otras muchas veces por suerte no lo consigue.
Pero este 8 de marzo, de nuevo, ha sido especial, porque el Departamento de Igualdad de la Diputación Foral de Álava ha decidió homenajear a las mujeres mayores rurales que han impulsado a lo largo de más de 25 años la vida asociativa de sus pequeños y grandes pueblos. Las conozco, conozco a la mayoría de ellas con el placer de haber estado durante muchos de estos años compartiendo espacios a veces luchas a veces risas y otras veces frustraciones y sinsabores.
Conozco a Edurne con su empeño y su capacidad de liderazgo, sabiendo hacia donde se dirige y con la capacidad de influir y movilizar a otras mujeres para construir un proyecto conjunto.
Conozco a Leonor rebelde, en un lugar discreto pero siempre disponible y arrimando el hombro a todo lo que se necesita.
Conozco a Antonia que ha hecho de la risa su manera de mostrarse al mundo, enseñando siempre como a través de un buen texto y una buena risa se puede reunir a las mujeres y trasladarles un rato de encuentro.
Conozco a M. Carmen que comprometida en diferentes organizaciones y con el apoyo de las mujeres de su pueblo trabaja por eso tan grande que es el bien común.
Conozco a Marian que a través de su viajar interior constante bucea en sus valores de paz y de crecimiento ofreciendo desde ahí un lugar de reconocimiento real y de desarrollo a cada mujer.
Conozco a Agustina comprometida, discreta, reflexiva que siempre desde esos valores intentará facilitar que los pueblos sigan teniendo vida…vida de mujeres.
Conozco a Judith que sigue con su sonrisa y su determinación hablando alto y claro para que su mensaje amable y contundente llegue a los diferentes foros.
Y sí también conozco a dos grandes mujeres que ya no están Karmele y María Jesús. ¡¡Me acuerdo tanto de vosotras!! , me acuerdo de vuestro cariño y de vuestro trabajo constante, de vuestra manera conciliadora de hacer y estar y de vuestra forma de intentar llegar a acuerdos que satisfagan a las diferentes partes. Y sobre todo de vuestra capacidad de lucha y determinación para seguir, para afrontar las situaciones más complicadas sin olvidaros de que el amor es lo realmente importante.
Pues estas mujeres son las que este 8 de Marzo han representado a muchas otras mujeres rurales de Álava que han sabido tejer verdaderas redes para abordar las necesidades de otras mujeres, generando un movimiento asociativo que ha conseguido facilitar espacios para el empoderamiento personal y colectivo de las mujeres y con un efecto multiplicador de estas para con sus hijas e hijos y sus nietas y nietos.
A pesar de no ser conscientes de ello las asociaciones de mujeres han sido las verdaderas artífices del cambio social en los pueblos, siempre con la mirada en la gestión de las necesidades individuales y en el desarrollo local desde la premisa del bien común. Por eso desde estas líneas agradeceros VUESTRA SABIDURIA, VUESTRO TESÓN Y VUESTRA MANERA DE TEJER VIDAS. ¡¡Es un placer conoceros y que forméis parte de mi vida!!
Miriam Ocio Sáenz de Buruaga